El error que una persona pueda cometer equivale al pecado, en la tradición judío-cristiana. Más aún, dicen que la etimología de «pecado» sería «errar el blanco». En palmirano puro sería «meter la pata». Algunos errores y pecados míos me traen amenos y eróticos recuerdos que endulzan la vida; no los relato aquí para no crear suspicacias y envidias entre los lectores de este texto. Claro, hay niveles de errores, pero el mayor de todos es no reconocerlos, no bajar la cabeza y no pedir disculpas; cuando han creado problemas entre la gente. En los textos bíblicos se habla de «pecados» y de «pecado». El primer término no necesitamos comentarlo, serían los pecadillos, los yerros veniales, aquella dinámica de la vida que nos permite aprender. El último se refiere a la seguidilla de meter la pata, saber que se metió, y no reconocer el hecho; algo típico en todos los políticos, tanto izquierda como de derecha (incluyo aquí a los del centro también).
(Carlos Humberto Llanos)
No hay comentarios:
Publicar un comentario