Turner sabe lo que dijo el relámpago antes que la luz cegara la tarde (Fernando Denis)
Joseph M. W. Turner (1775 – 1851) fue un pintor inglés especializado en paisajes; trabajó el óleo y la acuarela con igual habilidad. Vi sus pinturas en libros de bolsillo de la editora Salvat cuando yo era aún joven y solo observaba cuadros pintados por algunos familiares que eran vecinos de mi casa paterna. La impresión fue supremamente fuerte, y me transporto a otra dimensión de mi sensibilidad ya inclinada a la nostalgia. No conseguía entender cómo algunas pinturas podían ser tan borrosas y bellas.
Cuando leí algo sobre su vida descubrí que fue sobrio en sus maneras personales y en los gastos, lo que le permitió vivir sin grandes sobresaltos financieros. Tuvo la curiosidad de conocer el continente europeo, haciendo largos viajes, en los que captó las visiones del mundo con aquella receptividad de los grandes artistas.
Turner vio la luz en las fuerzas de la naturaleza. Sentía una vocación impulsiva por someterse a las inclemencias, inclusive poniendo en peligro su vida. Pues un artista solo puede transmitir aquello que vive, a pesar del espanto. Si aceptamos la frase de que Beethoven era clásico en la forma y romántico en el contenido, podemos afirmar que su forma es romántica, plena de nebulosidades, de sombras, de una tristeza mística. Pero su contenido es la luz como horizonte, como punto de fuga en su perspectiva.
Para mí su pintura profetiza los advientos del impresionismo, en donde el objeto pasará a ser la luz en forma de gotitas. Lo que nos hace percibir la dualidad de la luminosidad —aquella descrita por los físicos modernos—, como la experiencia que llega al observar los cuadros de Camille Pissaro —el puntillado que esconde la continuidad que ondula.
Creo que si Turner hubiera vivido más años su paisajismo se habría desdoblado precozmente en la pintura abstracta, que aparecería en los comienzos del siglo XX, pues los objetos en sus paisajes tendieron a desaparecer en la medida en que su obra maduraba.
Tal vez por su punto de fuga luminoso poetas como Fernando Denis y William Ospina lo vierten en sus versos, pues la poesía dice y calla, describe y omite, se toca y desaparece.
(Brasilia, Marzo de 2021)
Fuentes de las pinturas: Google imágenes.