lunes, 31 de enero de 2022

Realidades

«En 20 años las tecnologías de realidad virtual serán meros electrodomésticos, tal cual ocurrió con el computador. Ahí podremos interactuar con los dragones, u otras realidades que queramos inventar. Si quisiéramos sentirnos como dragones tendremos que usar tecnologías milenarias, ya disponibles desde la prehistoria».

Carlos Humberto Llanos

miércoles, 26 de enero de 2022

Alucinando

Dicen que Borges es la fracción periódica, un ritornello que está de moda, que todos repiten; pero en Homero vemos el eterno retorno, por ejemplo, en la saga de Ulises. Solo que la narrativa de Borges es actual: no naufragan los barcos, naufragan los hombres, aun cuando estén en tierra. Creo que la alucinación es la misma en los dos. Pregúntenle a Gabo.

Carlos Humberto Llanos

Variaciones geométricas

«Amanuense de los susurros de un Dios cuyas distracciones debe suplir, el poeta inventa un orden posible». JLB

Una pequeña variación: «Paralelamente a las distracciones de un poeta ebrio, que en la concavidad de la noche se equilibra en una embarcación convexa, Dios pare los susurros de su creación esférica»

Carlos Humberto Llanos

lunes, 17 de enero de 2022

Poéticas

"Toda la poesía mala es sincera". W. H. Auden

Comentario: La buena poesía es como un perro fiel, deja ver al autor de lejos, y si el lector se acerca lo muerde.

El paraíso terrenal

Creo que el paraíso bíblico estaba conectado fuertemente con la naturaleza. Pero esta última es una biblioteca genética, o un corpus genómico, con una codificación vertida sobre una media en forma de espiral, y no sé si Borges se la imaginó de ese tamaño y formato. Se me ocurre que esto sería la verdadera torre de Babel: narrativas con el mismo abecedario que describen estructuras diferentes. Y para responder a los amantes de psicoanálisis, dicen por ahí que toda aberración nace en el momento en que nos colocamos la hoja de parra para vestir el cuerpo y exiliar el placer, ¿por qué no hacemos una campaña para quitárnosla? Toda corrupción es bien vestida, decía mi amigo César Giraldo.