domingo, 25 de noviembre de 2018

Diálogos indiscretos (X): Rupturas y Ciclicidades

Carlos, un terremoto acontece por el movimiento de las placas tectónicas, que fluctúan en un ferviente mar de magma, ¿cierto? Cualquier revolución tiene un aspecto sísmico, en la política, en la religión y, creo, que hasta en la ciencia. En el arte las cosas también fluctúan; no en el mar de las estéticas, sino en el océano de las pausas y de las erupciones: de formas, de notas, de colores, de palabras –que vienen y desaparecen. No hay arte verdadero sin irrupciones, que emergen a través de las fisuras en las estructuras. El artista es revelador, sísmico y cíclico, y sospecha que su magma es mas importante que su propia forma. 

Con esas palabras mi amigo César Giraldo intentaba aproximar su visión del mundo a las cosas de la vida; por ejemplo a los movimientos sociales, que son dilucidados en el derecho, en la sociología, en la política. Afirmaba que cualquier cambio brusco de conducta grupal, o  de paradigma no podía ser resuelto ni entendido en esas áreas, o dimensiones. La violencia en Colombia, por ejemplo, no estaría en el ámbito de lo político; así como la revolución francesa no podría ser entendida por cualquier lógica mecanicista, sociológica o política. Me hubiera gustado escuchar su opinión sobre la actual estado de la política en Brasil. 

Pues es el magma que transporta las placas tectónicas y las hace colisionar. Y es el magma que decide explotar e  infiltrarse por las fisuras es el poema el que se infiltra a través del poeta. 

No son los cambios de paradigma, que emergen en el discurso científico, los que explican los avances científicos (como lo afirmaba Thomas Kuhn). Pues el magma fue el que hizo emerger el cálculo diferencial, casi simultáneamente, en Newton y en Leibniz; o la relatividad de Einstein, que ya era percibida por Poincaré. O el impresionismo en Monet, Pissarro, Degas, Renoir, en Cézanne, y en Debussy.

Así su visión de la historia, y de las cosas, era mecanicista: por eso de las placas, de las fisuras, de los choques. Pero también contenía los ingredientes de aquello que conjuga  lo plausible y  lo improbable, lo cíclico, tal como el hacer artístico, el comportamiento de los vórtices del magma terrestre, o de las tempestades solares.

Afirmaba: "es el magma lo que está por detrás de los reveladores, de los artistas, de los profetas".

(Brasilia, noviembre de 2018).